sábado, 26 de marzo de 2011

Detour



Dirigida por Edgar G. Ulmer en 1945 es un clásico de "culto" del cine negro. En su momento tuvo buenas críticas y más tarde, en los años sesenta y setenta se consideraría una película de serie B que valía la pena ver. Aún siendo serie B tuvo éxito cuando se estrenó y a lo largo del tiempo se ha ido revalorizando hasta alcanzar la cima en la que perdura.



Un crítico actual la define así:
"Ésta película de ínfimo presupuesto, filmada en seis días, llena de errores técnicos y narración torpe, protagonizada por un hombre que sólo sabe poner mala cara y una mujer que sólo sabe burlarse, debería haber desaparecido al poco de estrenarse. Y todavía  se mantiene inquietante y espeluznante, una personificación del alma culpable del cine negro. Nadie que la haya visto puede olvidarla fácilmente . 
Es una obra maestra en su género. Ha habido cientos de  películas mejores , pero ninguna con la sensación de perdición retratada por... Ulmer." 









Por si eso fuera poco añadiré que el personaje que interpreta Ann Savage es de antología, una perfecta combinación de maldad y desidia, y ella es una de las pocas actrices de serie B que merecen un lugar en la historia universal del cine. Cuando ésta femme fatale aparece por primera vez, en su primer fotograma, una sensación de inquietud empieza a recorrerte el cuerpo y te dices uy, algo no va bien, parece que hay un giro en la trama, y sí,  Detour significa eso, "desvío". A partir de ahí es un viaje.







                          



















sábado, 12 de marzo de 2011

Ternura













 








  


























Shambala

 
   En los antiguos mitos budistas aparece un paraíso perdido, Chang Shambala, situado en algún lugar más allá del Tíbet, perdido en las montañas del Himalaya, habitado por seres inmortales que viven en armonía con la naturaleza y el universo.


   En 1933, James Hilton escribió Horizontes perdidos, donde describe una ciudad basada en el mito de Shambala, la llamó Shangri-la, estaba poblada por un grupo de elegidos provenientes de distintas partes del mundo y gobernados por un misionero católico convertido en Dalai Lama. Frank Capra dirigió una deliciosa película con el mismo título.

El Potala tibetano, asociado a la leyenda de Shambala
   El mito de Shambala es una adaptación de otro mito hindú y es recogido en los escritos del Kalachakra Tantra, la más esotérica rama del budismo tibetano. En ellos se habla de una "tierra pura" donde sus habitantes han alcanzado la iluminación y viven felices en eterna juventud.


  Como muchos conceptos del Kalachakra Tantra la idea de Shambala tiene un significado oculto, aunque es un lugar físico, sólo acceden a él los que tienen el karma apropiado. Pero también es un lugar místico que simboliza el cuerpo, la meditación y la trascendencia.


   Los textos religiosos tibetanos hacen una descripción física del lugar: se creía tenía la forma de un loto de ocho pétalos porque estaba hecha de ocho regiones, cada una rodeada por un anillo de montañas. En el centro estaba la capital, Kalapa, con su palacio hecho de esmeraldas, diamantes y coral.


   La capital está rodeada de montañas de hielo que lucen con una luz cristalina y existe todo un entramado de túneles subterráneos que comunican todo el territorio. Los habitantes de Shambala poseen la capacidad de la clarividencia, de moverse a grandes velocidades y de materializarse y desaparecer.
Aquellos que alcanzaron a entrar en la ciudad nunca más volvieron, porque se quedaron allí o porque fueron destruídos.


miércoles, 9 de marzo de 2011

Oh, Senectud

Llegada cierta edad, podría debatirse cuál, existe una convención social que obliga, exhorta, impele a las mujeres a vestirse de puretas, de "señoras mayores", ya no caben colorines ni diseño y el pelo mejor que lo lleven corto y si peinan canas mejor con reflejos violeta. En otras palabras relegar a la mujer al ostracismo total por haber sobrepasado ya la edad en la que pueden gestar.
Sólo las mujeres con cierta independencia pueden saltarse esa regla y hacer y vestirse como les venga en gana. He aquí el ejemplo de unas cuantas, famosas y anónimas, que deberían ser fuente de inspiración para las demás mujeres y no objeto de crítica por nuestra parte, sino lo que son: iconos de la mujer liberada y moderna, sea cual sea su dichosa edad.


Daphne Guinness (1967) está emparentada lejanamente con un personaje de Truman Capote, Gloria Guinness, otro icono de la moda ya inmortal gracias al escritor. Viste alta costura pero a pesar de no ser todavía muy mayor lleva mechones de canas adornando sus sienes.





La primera vez que ví una foto de Anna Piaggi (1931) exclamé: Quiero saberlo todo de ella!. Y claro, era editora de Vogue Italia, pero no todas las editoras del Vogue visten con tanta imaginación y derrochan tanta libertad a la hora de mostrarse antes los excrutadores ojos del resto del mundo. Viva la señora Piaggi y su arrolladora personalidad!










Iris Apfel (1921) es una autoridad en el mundo de la moda, tanto es así que el Metropolitan Museum de Nueva York le dedicó una exposición.  Ella misma ha decorado la Casa Blanca para nueve presidentes de Estados Unidos (Kennedy incluído). Sigue siendo la reina de los accesorios.







Anónimas, talluditas y estilosas:

























Referencias:    Advanced Style